Cómo me entristece la paloma del valle
que se balancea sobre una rama trémula y tierna!
Juega porque nunca sufrió la altanería de Zaynad,
ni la aparición constante de su imagen en sueños.
No esperes vivir, si Zaynad te ha roto el corazón,
porque no se puede vivir sin corazón.
Ella
que si a la Luna en los cielos
se le hubiera preguntado
sobre su naturaleza,
el astro habría respondido:
"Soy un destello de ella".
Mi corazón se va de mí.
Mi corazón se me va de mí.
¡Oh, Dios! ¿Acaso se me tornará?
¡Tan fuerte mi dolor por el amado!
Enfermo está, ¿Cuándo sanará?
¡Oh, Dios! ¿Acaso se me tornará?
¡Tan fuerte mi dolor por el amado!
Enfermo está, ¿Cuándo sanará?
¿Qué haré o qué será de mí?
¡Amigo mío,
no te apartes de mí!
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